Jamás creí en el amor, ni en el sentido de que se podía caer prendida por
un amor que nació de un beso, quisiera ser un poco mas fuerte a como tu lo
eres, no puedo controlar mis emociones, no puedo guardar silencio ante las
injusticias, no puedo ahogar un te amo en recuerdos.
Mi corazón se había apagado, ante tal desesperación de que los días se
estaban pasando muy rápido, no tenía sentido, ni razón el tener que estar presa
en una casa sin poder llamar o ver a alguien solo porque mi conducta se alteraría nuevamente y trataría
de buscar al hombre de mis sueños del cual no sabía nada, pero estaba obstinada
con que lo había visto.
No sé si en sueños, no sé si en la vida real pero quería encontrarlo, quería
volver a mirar sus ojos y besarlo, no podía soportar tal escusa de que no es el
hombre indicado para ti, ni millones de cuentos que me inventaban sobre su vida,
estaba dispuesta a recorrer por aquellas espinas para poder aceptar la flor, no
dudaba de que en esa mirada profunda alguna vez pudiera encontrarme.
No existía persona que pudiera borrarlo de mi mente, sus mensajes
alegraban por instantes mi vida, su recuerdo era constante y hasta para dormir
recordaba su beso, aquel que fue como bendición, aquel que logro quitar la
venda y demostrarme que existe el amor.
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